El pasado martes 12 de noviembre, en el salón Bar del Centro Cultural Osorno, a las 18:00 horas, se llevó a cabo la presentación de los resultados preliminares de la investigación “Censo 1907-1908: Censar la Historia, Censar la Memoria”. Este proyecto, financiado por la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (CONADI), busca analizar el primer censo orientado a conocer a la población mapuche que habitaba en la Fütawillimapu, realizado durante el verano de 1907-1908.
El censo, efectuado en las actuales regiones de Los Ríos y Los Lagos (provincias de Valdivia y Llanquihue en ese entonces), se realizó con el objetivo de registrar información clave sobre la población mapuche-williche: su número, bienes, desplazamientos y la situación de las propiedades indígenas. En la provincia de Valdivia, esta tarea fue liderada por la orden capuchina, mientras que en Llanquihue estuvo a cargo de la Inspección de Tierras y Colonización.
Este documento, que permaneció bajo resguardo institucional por más de un siglo, representa una fuente invaluable para comprender los procesos históricos que marcaron el despojo territorial y las transformaciones sociales de las comunidades mapuche-williche.
El equipo de investigación subraya la relevancia de liberar y socializar estos archivos históricos, especialmente en la provincia de Osorno, donde los resultados del censo son poco conocidos por las comunidades locales. Según los investigadores, estos datos permiten analizar aspectos fundamentales como:
En cada plantilla censal se registra información detallada sobre los “ranchos” o espacios habitacionales: nombres, autoridades, ubicación, cultura material y organización social y familiar. Este material es crucial para el estudio de la sociedad mapuche-williche durante la primera mitad del siglo XX en la Fütawillimapu.
El proyecto cuenta con la participación de un equipo interdisciplinario:
Esta investigación constituye un aporte significativo para el fortalecimiento de la memoria histórica y la visibilización de la sociedad mapuche-williche, fomentando el diálogo entre la academia y las comunidades indígenas.